«Paolo nunca vino a conocer a su hijo, decidí divorciarme» – GENTE Online
 

"Paolo nunca vino a conocer a su hijo, decidí divorciarme"

-Cuándo te sacaste la alianza?

(Se toca el anular y oculta su mano debajo de
la mesa, sorprendida. De pronto, se rompe el silencio: Luca gime desde la cuna
que está instalada en el living íntimo del piso de Avenida del Libertador.
Zulemita pide disculpas, lo busca, lo pone contra su pecho, lo besa. Es hora de
darle de mamar. Otra vez el silencio, la televisión está encendida en TN, sin
volumen. Cuatro enormes marcos de plata dominan los estantes de vidrio: una foto
de toda la familia, otra de Zulema Yoma con sus hijos, una tercera de Carlos
Menem con Carlitos Jr., y por último una de Zulemita, feliz, vestida de novia,
besando a Paolo Bertoldi. Ya nada de eso existe).

-Me saqué la alianza hace dos días… Fue cuando decidí divorciarme.

-¿Divorciarte?
-Sí. No lo hablé con nadie. Estaba sola en mi habitación, me saqué el anillo, lo
puse un el cajón y lo cerré. No fue fácil. Lloré toda la noche. No iba a seguir
toda la vida con una alianza y sin marido, ¿para qué?

-¿Qué te llevó a tomar esa decisión?
-Cuando vi que habían pasado 18 días y Paolo no venía a conocer a su hijo. Pensé
que no podía seguir justificándolo. En una pareja siempre hay que ceder para que
el matrimonio funcione. Y siempre busqué entenderlo, encontrarle excusas a sus
actitudes. Decía: "Bueno, no vino 15 días antes del nacimiento porque seguro que
tiene mucho trabajo…", "Bueno, no llegó al parto porque el bebé se adelantó"

(tenía fecha para el 4). Pero ahora ya pasaron muchos días. Que no haya venido
me parece una actitud inmadura que no entiendo. No puedo seguir siendo ciega.

-¿Qué pasó entre ustedes para que tu marido no haya viajado a conocer a su hijo?
-Todo empezó porque habíamos quedado en que el bebé iba a nacer en la Argentina.
Es lo único que yo le había pedido. Nos habíamos casado en Italia, porque su
papá es grande y no podía viajar tanto. Ibamos a vivir en Miami, porque él
trabajaba allá y a mí me parece bien, como mujer, seguir a mi marido. Por eso,
estábamos de acuerdo en que nuestro hijo fuera argentino. Acá yo me sentía más
contenida: estaba mi mamá, mi familia, los médicos. Pero después empezó a
cambiar. Estoy convencida de que no me equivoqué al casarme con él, porque es
una muy buena persona, con un gran corazón, pero lamentablemente hoy tiene malas
influencias de gente muy cercana y que no fueron positivas para el matrimonio.
Teníamos todo para ser felices y se destruyó.

En el piso de Avenida del Libertador, abraza y se adapta a los nuevos horarios que le impone Luca. Teníamos todo para ser felices. Pero él eligió oír unas campanas que terminaron destruyendo nuestro matrimonio", confiesa.">

En el piso de Avenida del Libertador, abraza y se adapta a los nuevos horarios que le impone Luca. "Teníamos todo para ser felices. Pero él eligió oír unas campanas que terminaron destruyendo nuestro matrimonio", confiesa.

Zulemita apenas engordó diez kilos en el embarazo. Ya recuperó su espléndida figura, pero por ahora no se cuida porque da de mamar cuando el bebé lo pide". A los 18 días ya pesaba 3,845 kilos.">

Zulemita apenas engordó diez kilos en el embarazo. Ya recuperó su espléndida figura, pero por ahora no se cuida porque da de mamar "cuando el bebé lo pide". A los 18 días ya pesaba 3,845 kilos.

Más información en Gente

 

Más Revista Gente

 

Vínculo copiado al portapapeles.

3/9

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit.

Ant Sig